Buenos días a tod@s
Pero antes de eso, voy a poner la nota nostálgica y os voy a contar en varios post, el increíble viaje que he hecho este verano con unos amigos y del que ya os anticipé algo aquí y aquí.
Sí, así es, durante la última quincena de agosto me dediqué a conocer la Coste Oeste de EEUU. Tres estados, dos océanos y cientos de rincones maravillosos que he recorrido gracias a una aventura en la que he estado muy bien acompañada y que, a pesar de US Airways y sus retrasos, huracanes con nombre de mujer que amenazaban con no dejarnos volver a España, y algún que otro terremoto en plena noche, sin más consecuencias que un sustillo, ha sido fantástica e inolvidable.
Pero empecemos por el principio, porque nuestra aventura comenzó en Los Ángeles, una ciudad inmensa, con aire trasnochado y enormes contrastes que nos recibió calurosamente con los brazos abiertos. Nos alojamos en Hollywood Boulevard, en un motel autentiquísmo, con su piscinilla al centro y sus balconada corrida en el segundo piso. Lo mejor es que estaba a un paso del Paseo de la Fama y del Kodak Theatre.
He de decir que sin el boato de la alfombra roja, los famosos y demás, el Paseo de la Fama es más pequeño que la Gran Vía de Madrid y más bien poco glamouroso. Tiendas de pelucas de todas las formas y colores, infinidad de gimnasios, escaparates repletos de lentejuelas, purpurina etc. se disputaban espacio en sus bajos comerciales con las tiendas de souvenirs.
En los Ángeles se produjo también mi primer contacto con los pantagruélicos desayunos americanos, a base de huevos, bacon, gofres, tortitas, siropes y ese líquido negruzco que ellos creen que es café...Pero no me enrollo más y os dejo con algunas imágenes que ilustran lo que digo.
El segundo día en Los Ángeles aprovechamos para visitar Berberly Hills y Rodeo Drive (de pasada sólo sniff...)y para ir a la Playa de Santa Mónica, que sin duda fue lo que más me gustó de Los Ángeles, su inmensa playa, su pier, con noria incluida, y el Pacífico, un enorme y sereno océano, que sin embargo se vuelve revoltoso al llegar a la costa para gustazo de los surfistas.
En Santa Mónica, además, disfrutamos de un enorme centro comercial abierto, con un montón de tiendas chulísimas que por supuesto nos recorrimos de pe a pa... sobre todo Urban Outfitters, donde literalmente arrasamos.
No tuvimos tiempo de visitar Venice Beach que dicen que es un sitio ideal, pero es que había taaaantas cosas que ver y un día de menos por la pérdida de la conexión de Filadelfia que hubo que que seleccionar.
Al día siguiente recogimos nuestro coche de alquiler y partimos rumbo a Pismo Beach por la carretera de la costa, que nos brindó estupendos paisajes y lugares tan idílicos como Santa Bárbara, pero eso será mañana...
to be continued...
Outfit primer día: Pantalón Zara, camiseta (mi preferida de este verano) del mercadillo, naúticos de Salvador Artesanos.
Outfit segundo día: Short de Berskha, camiseta y sandalias de Zara, bolso de Day a Day, cinturón de Sfera y rebeca de Blanco.
Ya veo (y leo) que te lo has pasado genial... well done!!! y te veo muy guapa! ya me contaras mejor cuando te vea en casa :)
ResponderEliminar¡¡Alucinante el viaje!! Me encantaría ir a EE.UU. pero para eso tengo que ahorrar mucho mucho jajajajaja
ResponderEliminarSe nota que lo has pasado en grande y las fotos son geniales; ¡estoy deseando ver más!
Muchos besos cielo =)
Ala! Que envidia!! Supongo que lo parariais genial! :)
ResponderEliminarMe encanta como vas vestida, un look comodo, informal y actual! :)
Pasate por mi blog y visita mis outfit si te apetece! ;) Besos
http://theladyoflovelysmile.blogspot.com/
Yo quiero ir!!!
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